José María Rodríguez y Luis Seroni son ex combatientes de Malvinas. Durante mucho tiempo se sintieron parte de la denominada “Gesta Patriótica” y participaron de los actos conmemorativos que se realizan el 2 de abril de cada año, en homenaje a los veteranos y caídos durante esa guerra.

Sin embargo, después de transitar cada día de sus propias vidas como “sobrevivientes”, desde  aquél 2 de abril de 1982 en que el entonces presidente de facto de la Argentina, Teniente General Leopoldo Fortunato Galtieri, decidió llevar a cabo una “gesta heroica” para recuperar la soberanía sobre las Islas Malvinas, ocupadas por Gran Bretaña desde 1833, ambos se sienten “víctimas”, muy lejos de la figura de “héroes” con la que los diferentes gobiernos y la sociedad, los obligaron a crecer.

La “gesta heroica” del dictador Galtieri se basó, principalmente, en mandar a la guerra a chicos de 18/19 años de edad, quienes se encontraban realizando el servicio militar obligatorio, y a otros tantos que fueron reincorporados para servir a la “causa”. Chicos que, como José María y Luis expresan, “no sabían distinguir un teniente coronel de un sargento”,  ni un arma de otra, ni quién podía ser el enemigo en una guerra que ellos no habían elegido y sobre un conflicto que no habían aún alcanzado a comprender en sus recientes pasos por la escuela secundaria.

José María y Luis viven en Bariloche. No entienden la guerra. No la comparten. Ni la de Malvinas ni ninguna otra. Hoy, 37 años después, pueden sincerarse y afirmar, como lo hizo José María, que “si le tocara ir a un hijo mío a la guerra, lo escondería en un sótano hasta que termine” el conflicto bélico.

Ambos son padres, trabajan, llevan una vida que seguramente encuadra en lo “normal” a los ojos de los demás. Es que el interior de cada ser humano es invisible… Y los dos saben que convivirán eternamente con lo que tuvieron que vivir a la fuerza, obligadamente, sin siquiera poder emitir opinión o decidir. Muchos de sus compañeros jamás regresaron de las Islas. Muchos de ellos tienen una placa que los identifica para poder recordarlos como corresponde. Otros tanto, todavía, solo tienen una cruz blanca y la sigla que nadie quisiera portar: NN.  Algún día, la Nación Argentina,  debiera devolverles la identidad a los muertos y la dignidad a los sobrevivientes.

José María y Luis no desfilan como héroes de Malvinas  frente a los palcos en los que posan las figuras políticas del momento. Han organizado una  “Caminata por la Paz” que este 2 de abril de 2019 tendrá su segunda edición. Aún a nivel nacional nadie quiso prestarles atención para replicarla en cada rincón de nuestra vasta geografía. Pero así y todo, se muestras esperanzados que esta idea cobrará fuerza y será la forma en que se conmemore a quienes no se consideran héroes sino víctimas de un “borracho y dictador” que los envió a la muerte.

Este 2 de abril, en Bariloche, la Caminata por la Paz, que tiene como única condición no portar “banderas políticas ni gremiales, ninguna pancarta, ningún uniforme”, partirá 17:30 hs. desde el Monumento a los Caídos en Malvinas, frente al edificio del Departamento Provincial de Aguas (DPA), Av. Costanera 1400, y desde allí se dirigirán charlando y tomando mate mientras “pensamos y re pensamos nuestra historia”  hasta arribar, “siempre por la vereda de la Costanera sin interrumpir el tránsito vehicular” – aclaran –,  hasta el Centro Cívico de la ciudad, donde cantarán "Para la guerra nada", de la cantautora Marta Gómez.

Roxana Arazi

(entrevista en Café a la Turca del 27/04/19, FM Horizonte)