Este miércoles 25 de julio Santiago Maldonado, cumpliría 29 años… No le podrán celebrar su aniversario.  Por el contrario, el 1ro de agosto su familia, amigos y muchísimos argentinos, recordaremos otro aniversario: el de su desaparición seguida de muerte.

Porque el 1ro de agosto de 2017, Santiago Maldonado, despareció de la Pu Lof Cushamen, donde se encontraba “de paso” apoyando un reclamo ancestral de la comunidad mapuche: el derecho al territorio. Las fuerzas de seguridad, las mismas que hoy por decreto presidencial tendrán más poder para accionar en seguridad interior (prohibido por ley desde la llegada de la democracia a nuestro país), ingresaron al lugar y reprimieron a los pocos habitantes que custodiaban su tierra. Pero claro está, ese retazo preciado de tierra está en cercanías de la estancia de Benetton, el magnate italiano dueño de gran cantidad de ricas hectáreas en la Patagonia Argentina.

Dicen que dicen… Los medios hegemónicos se encargaron de bajar la línea que desde el Ministerio de Seguridad de Nación le marcaban. Santiago escapó… Santiago fue visto en Entre Ríos… En esa provincia aparecían Santiagos Maldonados por todas partes; Santiago hizo dedo.. A Santiago lo mataron los mapuche…Santiago es un hippie con rastras a quien le pasó algo porque en algo andaría… Y así los días y así la vida. De Santiago...que seguía sin aparecer. Y de su familia que no tenía descanso ni paz, mientras pueblo, cientos, miles de personas, acá en Bariloche, en la Plaza de Mayo y en muchísimos rincones del país y del mundo, reclamábamos su aparición con vida. 

La justicia cambiaba de manos, de protagonistas. Las pruebas no servían… los testimonios siempre resultaba falsos o pocos creíbles para los medios que seguían difundiendo según las órdenes que llegaban "de arriba".

Las plazas se replicaban y Sergio Maldonado, el hermano que tomó la responsabilidad de no bajar los brazos y luchar hasta el cansancio junto a su compañera Andrea Antico, seguía buscándolo.

17 de octubre de 2017… Día de la Lealtad Peronista. Por esas cosas del azar… o no, o será por esas cosas de vincular un hecho que se le fue de las manos al gobierno de Cambiemos con la oposición, el cuerpo sin vida de Santiago, apareció ese día peronista. En un  lugar donde habían rastrillado varias veces, no una, varias veces y nunca había habido una sola señal. “Se ahogó” determinaron. Y si, claramente estaba sobre un río, poco profundo pero gélido. Pero ¿ahogado cómo? .¿Por qué? . Ahogado y punto, replicaron los voceros periodísticos del poder de turno (que se cree eterno), los funcionarios, las vecinas y vecinos que necesitan seguir creyendo en este modelo represor y violento. Pero como dijo hoy Sergio (el hermano de Santiago) en Café a la Turca: “mirá lo que recuerdo: el perro que llevaron al lugar (entrenado, claro está), no olió a Santiago… Raro ¿verdad?”. Y entonces me nace sugerirte que al menos te preguntes si eso no es extraño. El perro estaba en la zona, apareció el cuerpo de Santiago, pero el perro no alertó.

Pero la historia, lamentablmente no termina en Santiago, ni en el pedido de verdad y justicia que seguiremos exigiendo, hoy, el 1ro de agosto y siempre, hasta el cansancio. Siguió con Rafa Nahuel, asesinado por el grupo Albatros por la espalda, y sobre quien también escriben, hablan, opinan y desprestigian insistentemente desde los mismos sectores. Y sigue, con más poder asignado a las fuerzas de seguridad en un rol que no les competía, hasta hoy en que salió un decreto presidencial, aunque hay que decirlo, sin pasar por el Congreso. Sin debate. Sin que les importe qué pensamos muchos. Me permito pensar que porque saben que la mayoría no aceptamos y decimos NUNCA MAS!!

Este miércoles (25/07/18), en lo que sería el cumpleaños de un pibe con muchos sueños, ideales y con toda una vida por delante, pero muerto a destiempo, no habrá celebración. No estará el abrazo de la mamá, que aprendió a militar desde el dolor más cruel; ni del padre, ni de los hermanos, ni de sus amigos, ni de gran parte de un pueblo que sigue esperando que se sepa la verdad para que Santiago descanse en paz. Esa paz que seguramente no encontrarán jamás quienes dieron la orden de matarlo, de encubrir y de seguir imponiendo la fuerza por sobre la razón.

Hoy, martes 24 de julio de 2018, Sergio Maldonado me prestó una hora de su tiempo. No fue una entrevista radial. Fue una charla de café, lisa, sincera, afectuosa. Pero en la que el dolor y la impotencia no faltaron a la cita.

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Roxana Arazi